Reconocer que necesitas ayuda es el primer paso. El segundo no debería ser tan difícil.
Sientes que algo no está bien, pero el universo de opciones es tan abrumador que no sabes por dónde empezar, o por qué lo que has intentado hasta ahora no funciona.
Sientes que algo no está bien, pero el universo de opciones es tan abrumador que no sabes por dónde empezar, o por qué lo que has intentado hasta ahora no funciona.
Te preocupa invertir tu tiempo y tu historia más personal en alguien que no te entienda de verdad, o peor aún, ya has vivido esa mala experiencia y no quieres repetirla.
Fuente: de los deseos
¿Hay una compatibilidad natural entre tu y el psicólogo?
¿El psicólogo ha tratado casos como el tuyo con éxito?
¿Su metodología es la que mejor se adapta a tus necesidades y forma de ser?
¿Su forma de comunicar es la que tú necesitas para abrirte?